Desmontado mitos desde la ciencia y la teoría feminista para prevenir y desterrar la violencia machista del ámbito universitario

La jornada, que también se emitió en streaming, estuvo organizada por el Grupo de Investigación de Pareja y Familia (GRPF) de la Universidad Ramon Llull y estaba subvencionada por el Pacto de Estado contra la Violencia de Género.

El objetivo era abordar la problemática analizando las causas de esta violencia, que muchas veces tienen su origen en creencias e ideas preconcebidas sobre la naturaleza de mujeres y hombres. El encuentro duraba toda la mañana y se dividió en dos mesas redondas.

"Aportaciones científicas y crítico-feministas en la lucha contra la violencia machista"

La primera taula, moderada per la Dra. Berta Aznar, va tenir com a primera ponent la Dra. Mara Dierssen, neurobiòloga, investigadora i professora universitària, que va desmentir amb base científica totes les fal·làcies entre homes i dones que encara hi ha a la societat. Amb anuncis publicitaris i experiments socials reals va exemplificar com la societat crea en els infants, durant els primers anys de vida, els estereotips que després perduren en la nostra vida. "La societat alimenta els estereotips entre homes i dones, estan al nostre dia a dia i això crea moltes conseqüències a l'hora de decidir, per exemple, quina carrera estudiar o de què treballar en un futur". Les dones s'enfronten regularment amb obstacles per ascendir en la seva carrera professional.

La primera mesa, moderada por la Dra. Berta Aznar, tuvo como primera ponente a la Dra. Mara Dierssen, neurobióloga, investigadora y profesora universitaria, que desmintió con base científica todas las falacias entre hombres y mujeres que todavía existen en la sociedad. Con anuncios publicitarios y experimentos sociales reales ejemplificó cómo la sociedad crea en los niños, durante los primeros años de vida, los estereotipos que después perduran en nuestra vida. "La sociedad alimenta los estereotipos entre hombres y mujeres, están en nuestro día a día y esto crea muchas consecuencias a la hora de decidir, por ejemplo, qué carrera estudiar o de qué trabajar en un futuro". Las mujeres se enfrentan regularmente con obstáculos para ascender en su carrera profesional.

La ponencia de la Dra. Silvia Carrasco, profesora de antropología social, trataba del sexo y el género y analizaba por qué es importante diferenciarlos para entender la teoría feminista. Desde su experiencia en primera persona, la doctora Carrasco explicó que aún está por seguir trabajando para no aceptar ningún tipo de violencia ni dentro ni fuera de la universidad. "La indiferencia no puede justificar la desigualdad, ni la violencia" argumentaba. Muchas culturas construyen el género desde un punto de vista patriarcal. Los hombres no son violentos por naturaleza, por lo que educar en contra de la violencia política, en la violencia del lenguaje y en todos los tipos de violencia es tan crucial. Hay que hacer un gran esfuerzo, un esfuerzo cultural, decía.

La Dra. Pilar Aguilar, escritora y crítica de cine, continuó la charla con mucho sentido del humor, centrándose en el relato audiovisual y en el papel de las mujeres en el cine. Existe un seísmo entre lo que racionalmente se estipula y lo que realmente se admite, entre los valores pensados ​​y los valores sentidos. No hay casi películas de la lucha y la historia de las mujeres y merecen estos relatos; hay mucha materia, hay muchas historias sin contar. "Somos lo que hacemos para cambiar lo que somos", y cerraba recomendando filmes por ella muy interesantes, como las últimas de la directora catalana Carla Simón.

La última ponente de la primera mesa redonda fue la Dra. Inma Pastor, profesora titular de Sociología de la Universidad Rovira i Virgili, que acercó al público a una visión sobre la violencia de las mujeres en la educación superior. Nos detalló cómo se percibe y cómo se explica por parte del alumnado en la universidad. Asegura que es imprescindible seguir recabando datos, por eso se realizó una encuesta con el tema "¿Hay sexismo en la universidad?", que respondieron a más de 10.000 alumnos de diferentes universidades catalanas. Las conclusiones apuntan a que la gran mayoría de universitarios reconocen sin problemas qué es la violencia y tienen una visión muy poco sexista sobre los roles tradicionales, pero también hay aspectos importantes que aseguran que debe seguir educando en esta línea.

En la segunda mesa, moderada por el Dr. Josep Castillo, se conocieron con profundidad tres proyectos de investigación que abordan problemáticas relativas a la desigualdad de género y la violencia machista.

La Dra. Rosa Rifà expuso el proyecto Violencias Sexuales en el Entorno de las Prácticas Clínicas del Alumnado de la Facultad de Ciencias de la Salud Blanquerna, en el que participaron 126 alumnos de prácticas. Un 11% de los estudiantes que respondieron aseguraba haber sufrido agresiones en el entorno de prácticas y, con diferencia, las que las habían experimentado más eran las estudiantes de Enfermería.

La Sra. Valentina Laferrara explicó el proyecto Mujeres en el Raval: las Necesidades de Formación Tecnológica de un Barrio en Pandemia, que tiene por objetivo visibilizar el nivel de acceso y el tipo de uso de las tecnologías por parte de las mujeres del Raval en situación de vulnerabilidad. Obtuvieron datos a partir de encuestas y entrevistas en profundidad y concluyeron que existe una brecha digital y que es necesaria una formación digital entre las mujeres de este barrio.

Por último, la Dra. Berta Vall mostró el trabajo "Evaluación de las necesidades de formación para identificar e intervenir en la violencia de género en el contexto social", que pretende ayudar a los profesionales de la escuela a reconocer y tratar a los niños y jóvenes expuestos a la violencia de género proporcionándoles soporte y orientación. Con encuestas y cuestionarios pudo afirmarse que más de la mitad del profesorado no conocen las herramientas ni los protocolos para identificar la violencia.

Fue todo un placer escuchar a las ponentes por sus mensajes y aprendizajes. Fue una jornada muy interesante porque se profundizó en los aspectos que deben tenerse presentes cada día para conseguir desterrar la violencia machista tanto del ámbito universitario, como de todos los demás, y porque se insistió en la importancia de la formación para acabar con el acoso.